No cabe duda de que una de las mejores opciones que podemos elegir si queremos garantizar el bienestar de los nuestros es hacernos con un seguro de vida. Gracias a estas pólizas podremos disfrutar de un gran número de coberturas. Pero, ¿siempre van a estar disponibles? Pues sí, ya que hay carencias en los seguros de vida, pero solo por una causa y no muy habitual. Te contamos cuál es y durante qué tiempo no podremos cobrar la prima asegurada.
Qué implica una carencia
Para que tengamos más clara la idea, lo primero que tenemos que conocer es en qué consiste un periodo de carencia y así sabremos si hay carencias en los seguros de vida. Se trata de un tiempo determinado en el cual las coberturas que hemos contratado con nuestro seguro no están disponibles, por lo que si nos ocurriese algo las compañías no estarían obligadas a ofrecer ningún tipo de indemnización.
La mayoría de las aseguradoras eliminan estos periodos, por lo que si contratamos un seguro de vida y se produce el fallecimiento, estaríamos totalmente cubiertos desde el primer día. La excepción llega cuando la muerte ha sido a causa de un suicidio, en este caso los periodos de carencia son mayores. Lo habitual es que no se ofrezcan las coberturas hasta pasado un año de la contratación o 15 meses en algunos casos. Lo cierto es que este hecho no se trata tanto como un periodo de carencia, sino como una exclusión, ya que la mayoría de las aseguradoras eliminan esta opción de fallecimiento mínimo hasta el primer año de vigencia del contrato.
¿Por qué incluyen las compañías los periodos de carencia?
El periodo de carencia es algo que debemos tener en cuenta a la hora de contratar un seguro de vida, ya que así sabremos el momento exacto en el que podremos hacer uso de las coberturas que hemos incluido. Aunque nosotros no vayamos a cometer ningún tipo de fraude con el seguro, hay personas que aprovechan esta oportunidad para beneficiarse de las ventajas que trae consigo un seguro de vida.
Como has podido comprobar, los seguros de vida son más ventajosos que el resto de pólizas ya que la mayoría, como por ejemplo las de salud, suelen contar con periodos de carencia prácticamente fijos, de entre 6 y 8 meses habitualmente. Por el contrario, otros seguros como el de los coches, no presentan ningún periodo de carencia, por lo que contamos con todas las coberturas desde el momento en que se produce la contratación.
Por tanto, contratar un seguro de vida, mientras no lo contratemos con la intención de cometer fraude, es siempre una inversión segura y una forma de proteger a los nuestros en caso de que fallezcamos. Puedes comprobar precios en este comparador de seguros de vida que, además, incluye las condiciones de cada póliza. Así, la respuesta a si hay carencias en los seguros de vida, la respuesta es casi siempre no. La única excepción para no cobrarla es que la muerte sea a causa de un suicidio.
