Un seguro de vida con cobertura de enfermedades graves te permite recibir una indemnización también en caso de que te diagnostiquen una dolencia seria. Por tanto, es un producto más completo que el seguro de vida tradicional.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), en 2018 las primeras causas de muerte en España fueron los tumores y las enfermedades del sistema circulatorio. Son dolencias que, cada año, se llevan a miles de españoles. Por eso, el cáncer o el infarto de miocardio se consideran enfermedades graves en los seguros, aunque también otras como el infarto cerebral, la insuficiencia real o las cirugías importantes, como el trasplante.
El diagnóstico de uno de estos trastornos es un duro golpe para cualquier familia. A veces, supondrá que el paciente tendrá que dedicar todo su tiempo y energía a mejorar y dejar a un lado el trabajo. Para estos casos, existen los seguros de vida con cobertura de enfermedades graves.
¿Qué diferencia hay con un seguro de vida?
Una póliza de vida tiene como objetivo proteger nuestro patrimonio en caso de que muramos. Si nos ocurre algo, nuestros beneficiarios recibirán una indemnización para ayudarles a mantener una buena situación económica.
A estos seguros se les pueden añadir coberturas extra. Por ejemplo, puedes contratar uno con invalidez, en el que recibirás la indemnización tú mismo si tienes un accidente y ya no puedes volver a trabajar. Es decir, hay pólizas que te incluyen más circunstancias para cobrar el dinero, no solo el fallecimiento.
El seguro de vida con cobertura de enfermedades graves te permite recibir una indemnización si te diagnostican una de ellas. A veces, ese dinero será el mismo que recibirías en caso de muerte, por lo que, si lo cobras por enfermedad grave, la póliza se anula.
En este punto, es importante que revises bien cómo te pagará la compañía de seguros si te diagnostican una dolencia seria. Puede ser un anticipo de tu póliza de vida (se descontará de la indemnización por fallecimiento) o un capital adicional al que ya contrataste por si mueres.
¿Cómo funciona?
Igual que un seguro de vida. Una persona paga una prima a cambio de que la empresa se comprometa a indemnizarlo en caso de fallecimiento o enfermedad grave.
La cobertura extra de enfermedad supone que la póliza trae otros servicios añadidos. Dependen de cada compañía, pero suelen ser coberturas médicas: segunda opinión médica, atención internacional, asistencia 24 horas, gastos médicos…
Para elegir la mejor póliza, lo más fácil es utilizar nuestro comparador. Con él puedes ver rápidamente qué te ofrece cada empresa y compararlo con otras aseguradoras.
¿Entra en vigor en cuanto lo contrato?
En el sector de los seguros, existe el término periodo de carencia. Hay pólizas que no entran en vigor en cuanto se contratan, sino que tiene que pasar un tiempo hasta que puedes usar sus servicios.
Algunas pólizas de enfermedades graves tienen periodo de carencia de entre 3 y 6 meses; es decir, tiene que pasar ese tiempo desde que la contratas para acceder a sus coberturas. En otros casos, aunque no hay periodo de carencia, la póliza se anula si el cliente ha fallecido antes de que haya pasado cierto tiempo desde el diagnóstico o la cirugía.
¿Se puede contratar si ya estoy enfermo?
No, ya que la aseguradora tiene que saber de tu enfermedad. Uno de los requisitos para contratar una póliza de vida es rellenar un cuestionario médico. Con él, se hacen una idea de la salud del cliente para calcular si es probable que vaya a necesitar el dinero pronto. Si tienes una enfermedad grave, la empresa sabe que tendrá que indemnizarte y no hará la póliza.
En cambio, es diferente si tuviste una dolencia seria y ya la has superado. Ahí, será la compañía de seguros quien estudiará tu caso y decidirá si seguir adelante con el contrato o no. Tu cuestionario médico (y quizá la revisión médica) le dará más información al respecto.
Recuerda que no debes mentir en el cuestionario de salud. La Ley 50/1980 establece que tienes que avisar de cualquier riesgo en tu vida. Por tanto, si estás enfermo, sigues un tratamiento o tienes una profesión peligrosa, debes informar. Si falleces por alguna de estas causas y mentiste a la aseguradora, no tendrás derecho a la indemnización.
¿Es caro un seguro de vida con cobertura de enfermedades graves?
No, si sabes dónde buscarlo. Nuestro mejor consejo es que te dejes asesorar por profesionales del sector y no te ciñas a una sola compañía. En nuestro comparador puedes ver la oferta de las mejores empresas del mercado y filtrar por aquellos productos que te interesen. En solo un momento, podrás elegir la mejor opción para ti e, incluso, contratarla online.
Para que te hagas una idea, una persona de 40 años podrá contratar 100 000 euros en un seguro de vida con cobertura de enfermedades graves desde 193 euros al año. Y, por solo 50 euros más, incluir la invalidez también. Por menos de un euro al día, estarás protegiendo tu futuro y el de los tuyos.