El seguro de vida riesgo no es un producto obligatorio, pero sí necesario. Contar con él garantiza la viabilidad económica de familia y allegados en caso de nuestro fallecimiento. A nuestra muerte, los beneficiarios reciben la indemnización firmada en el contrato. Sin duda alguna esa es la garantía común a este producto que adquirimos bien a través de una aseguradora o correduría de seguros. Pero esta póliza se puede completar para estar más protegidos en caso de enfermedad grave, invalidez, accidente de tráfico… Descubre los tipos de seguros de vida y las coberturas de los seguros de vida riesgo, para que elijas uno a la medida de tus necesidades.
Seguros de vida riesgo
Así se llama el producto al que todos hacemos referencia al hablar de contratar un seguro de vida. No hay que confundirlo con los seguros de vida ahorro, que suelen ofrecer las entidades bancarias y que no son más que otro producto financiero que ayuda a ahorrar, como pueden ser los planes de jubilación.
Aquí nos centramos en los primeros, en los seguros de vida riesgo, que ofrecen muchos beneficios. Está claro que la primera y esencial es pagar a los beneficiarios estipulados en el contrato de la póliza una importante suma de dinero que les ayude a cubrir los gastos asociados y a liquidar las deudas pendiente en caso de que el titular fallezca además de garantizar la estabilidad económica de los herederos, pareja o hijos.
Además de la indemnización, muchas de ellas también incluyen:
- Anticipo para gastos funerarios. La aseguradora adelanta una parte del capital para cubrir los costes del sepelio y de los trámites asociados al fallecimiento.
- Asesoría legal. Los beneficiarios del seguro recibirán ayuda para todo el papeleo y la burocracia que suele conllevar el fallecimiento de un ser querido (petición de ayudas, cambio de titulares, etcétera).
- Atención Psicológica
- Asistencia sanitaria. Para pequeñas dudas sobre temas de salud, algunos seguros de vida ofrecen consultas online con profesionales para así evitar tener que acudir a consulta.
De ahí la importancia de comparar e informarse de las características y las coberturas de cada servicio para tomar una buena decisión y no llevarse sorpresas desagradables en momentos tan delicados.
Coberturas complementarias al de indemninación por fallecimiento
Además se pueden añadir otras coberturas a los seguros de vida riesgo, para garantizar una mayor tranquilidad, también para el titular de la póliza.
1.- Invalidez absoluta y permanente
La garantía más habitual consiste en el pago de un capital igual al garantizado en caso de fallecimiento, si al asegurado le sobreviene una invalidez absoluta y permanente que le incapacite para la realización de todo tipo de trabajo remunerado. Es decir, se asimila la situación de invalidez con la de fallecimiento del asegurado y se anticipa el pago del capital, quedando el seguro anulado a partir de aquel momento.
Este seguro es el más común dentro de las garantías complementarias, y es de aplicación tanto a los seguros individuales como a los colectivos.
2.- Invalidez profesional
La cobertura de los seguros individuales suele afectar solo a la invalidez absoluta y permanente para cualquier tipo de trabajo. Eso significa que si el Instituto Nacional de la Seguridad Social solo te reconoce la total, también llamada profesional, no tendrás derecho a la indemnización de tu seguro de vida.
De ahí que se aconseje la contratación de la garantía de seguro de vida con incapacidad profesional, que también incluye la invalidez absoluta.
Consiste en el pago de un capital igual al garantizado en caso de fallecimiento, si al asegurado le sobreviene una invalidez total y permanente que le incapacite a seguir desarrollando su trabajo habitual.
3.- Enfermedades graves
La posibilidad de sufrir una dolencia grave es, por desgracia, muy real, pero también es muy alta la probabilidad de superarla. Su coste puede suponer miles de euros y muchos gastos adicionales relacionados con el tratamiento que no están cubiertos por la Seguridad Social. Ser precavido y contar con un seguro de vida con garantía de enfermedades graves aporta tranquilidad económica mientras dura el tratamiento y la recuperación posterior, para solo estar atento a la salud.
4.- Dependencia
Se paga el capital garantizado en caso de que el asegurado quede en situación de dependencia, es decir, que no pueda valerse por sí mismo y dependa de otra persona para realizar los actos más elementales de la vida, como vestirse, limpiarse, moverse, alimentarse, etc.
5.- Doble capital en fallecimiento por accidente y triple capital por accidente de tráfico
Si el deceso se produce de manera inesperada debido a un accidente o a un accidente de tráfico, los beneficiarios pueden contar con un extra de indemnización. Esta cobertura suele contratarse de manera opcional y encarece el coste de la prima anual. Es recomendable normalmente para personas jóvenes, ya que la probabilidad de fallecer por accidente en mayor.
6.- Fallecimiento de dos cónyuges
En caso de fallecimiento simultáneo a causa de un accidente del asegurado y su cónyuge, se garantiza el pago de un capital adicional. Unido al de la garantía principal, alcanzan el doble del capital garantizado. Esta garantía cobra especial importancia cuando se tienen hijos, ya que les protege de manera especial.
¿Por qué contratar un seguro de vida?
Si aún dudas en la respuesta a esta pregunta, recuerda que optar por un buen seguro de vida es una opción inteligente para asegurar la tranquilidad y la protección financiera ante eventos imprevistos como el fallecimiento o una discapacidad grave que afecte al asegurado o a su familia.
Contratar este seguro de vida también ofrece una sólida protección contra posibles deudas pendientes, como las hipotecarias, que el asegurado pueda dejar, proporcionando así un alivio financiero en momentos tan difíciles y evitando que las dificultades económicas agraven una situación tan dura. No pierdas más tiempo y entra ya en nuestro completo comparador online, fácil y gratuito, que te proporcionará los mejores productos del mercado de manera inmediata. Solo debes incluir tu nombre, edad, capital a asegurar y las coberturas que quieres añadir a los seguros de vida riesgo.